Irrompes, quebras, transgredís.
Pasas ese limite que cada vez te marco mas lejos de donde duele, y aun así:

Te vas de tu sector,
te ocupas de reconquistar en segundos lo que tardo meses en sacarte.
Invadís con tanta facilidad.

Te ocupas tanto de vos que no sé ni cuando te aparezco.
Debe ser por tu necesidad de saber,
por mantener el puesto,
de ocupar el podio.

Vivir en zinchada permanente,
empujar paredes y muros, poner en juego la felicidad.

No vale lo mismo hablar de cuerpos y medio.
No vale lo mismo hablar de amor y fin.
No es simple decir siempre las palabras sirven.
No es fácil volver a decir si.
No vale un no.


No vale el poder de una coma.
No, Vale.